Salmo del hoy

El Salmo 65 invita a alabar a Dios por sus obras y prodigios, bendecir su nombre y proclamar cómo ha devuelto la vida. Un canto de gratitud y testimonio de fe que convoca a todos los pueblos a reconocer su poder.

Salmo Responsorial

Sal 65, 1-3a.5.8.16-17

℟. Bendito sea Dios, que me ha devuelto la vida.

Aclamad al Señor, tierra entera;

tocad en honor de su nombre,

cantad himnos a su gloria.

Decid a Dios: «¡Qué temibles son tus obras!»

Venid a ver las obras de Dios,

sus temibles proezas en favor de los hombres.

Bendecid, pueblos, a nuestro Dios,

haced resonar sus alabanzas.

Fieles de Dios, venid a escuchar,

os contaré lo que ha hecho conmigo:

a él gritó mi boca y lo ensalzó mi lengua.