Salmo del día
- La Vega en Accion
- 17 oct
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El salmo celebra la dicha del perdón divino. Quien reconoce su culpa y confía en Dios halla refugio y liberación. La alegría nace de un corazón sincero.

Salmo Responsorial – Salmo 31 (32), 1-2.5.11
℟. Tú eres mi refugio, me rodeas de cantos de liberación.
Dichoso el que está absuelto de su culpa,
a quien le han sepultado su pecado;
dichoso el hombre a quien el Señor
no le apunta el delito.
℟. Tú eres mi refugio, me rodeas de cantos de liberación.
Había pecado, lo reconocí,
no te encubrí mi delito;
propuse: «Confesaré al Señor mi culpa»,
y tú perdonaste mi culpa y mi pecado.
℟. Tú eres mi refugio, me rodeas de cantos de liberación.
Alegraos, justos, y gozad con el Señor,
aclamadlo, los de corazón sincero.
℟. Tú eres mi refugio, me rodeas de cantos de liberación.











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