Salmo del dia
- La Vega en Accion
- 1 oct
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El pueblo exiliado en Babilonia llora por Sión y no puede cantar en tierra extraña; proclama fidelidad a Jerusalén, su mayor alegría.

Salmo Responsorial – Salmo 136 (137), 1-2. 3. 4-5. 6
℟. Que se me pegue la lengua al paladar si no me acuerdo de ti.
Junto a los canales de Babilonia
nos sentamos a llorar con nostalgia de Sión;
en los sauces de sus orillas
colgábamos nuestras cítaras.
℟. Que se me pegue la lengua al paladar si no me acuerdo de ti.
Allí los que nos deportaron
nos invitaban a cantar,
nuestros opresores, a divertirlos:
«Cantadnos un cantar de Sión».
℟. Que se me pegue la lengua al paladar si no me acuerdo de ti.
¡Cómo cantar un cántico del Señor
en tierra extranjera!
Si me olvido de ti, Jerusalén,
que se me paralice la mano derecha.
℟. Que se me pegue la lengua al paladar si no me acuerdo de ti.
Que se me pegue la lengua al paladar
si no me acuerdo de ti,
si no pongo a Jerusalén
en la cumbre de mis alegrías.
℟. Que se me pegue la lengua al paladar si no me acuerdo de ti.











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