Salmo de día
- La Vega en Accion
- 27 sept
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El Señor reúne y protege a su pueblo como pastor a su rebaño, convierte la tristeza en gozo y trae alegría a jóvenes y ancianos.
El Señor, pastor fiel que convierte la tristeza en gozo
La liturgia de este día propone como salmo responsorial un pasaje del profeta Jeremías (31, 10-13), que resuena con fuerza en medio de los pueblos: «El Señor nos guardará, como pastor a su rebaño».
El texto anuncia esperanza para Israel: aquel que fue dispersado será nuevamente reunido bajo la protección divina. Dios aparece como pastor solícito que rescata a su pueblo de manos más poderosas, liberándolo y conduciéndolo a la plenitud de sus bienes.
La visión profética se transforma en celebración: doncellas que danzan, jóvenes y ancianos que comparten el júbilo. La promesa es clara: la tristeza se convertirá en alegría y las penas serán aliviadas por la acción misericordiosa de Dios.
Este mensaje, proclamado hoy en la liturgia, recuerda que la fidelidad del Señor no abandona a su pueblo, aun en los momentos de dispersión o sufrimiento. Su cuidado de pastor y su poder redentor aseguran una vida renovada y la certeza de que la esperanza siempre vence a la tristeza.
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